Recientemente
estuvimos en Madeira y es irresistible compartir, al menos, una de sus rutas,
la más especial de las que recorrimos, por más que viaje y ruta puedan tener
cierta dificultad: algo más de dos horas de avión, estar en buena forma, no
tener vértigo y sí muchísimas ganas de vivir unos paisajes ¡IMPRESIONANTES!.
Os
queremos hablar de 5,5 km .,
casi 400 m
de desnivel y 2.5 hh, ruta vertiginosa y aérea literalmente tallada en la pared
de roca y escoria volcánicas. Parte a 1815 m . (pico Arieiro) y culmina a 1862 en el
pico Ruivo; o al revés. Realizada por los maderienses en los años 40 a golpe de pico, cincel y
martillo, casi la tendríamos más por auténtica obra de arte que de ingeniería,
por una escultura de colosales dimensiones y de perfiles fantásticos, pues
camina por el filo de collados y picachos, por sus arrugas, por túneles y
semitúneles, por escalones labrados en la piedra o de madera, incluso por
verticales tramos salvados gracias a estructuras metálicas... A derecha o
izquierda, o a ambos lados, el escabroso barranco, frenado a cuchillo
cincuenta, cien, trescientos, quinientos… metros más abajo.
Enlace
por si se quiere ver más fotos, reportajes, etc.:
En
Kinedomus Bienestar, tenemos a tu disposición toda
la información y ayuda para preparar tu jornada.
¡Feliz
escapada!
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